Siempre puede empeorar…
La editorial del Tel Quel de hoy me ha calentado un poquito el corazón y me hace sentirme ligeramente más optimista saber que de vez en cuando alguien da un golpe sobre la mesa y se atreve a decir que ça va pas. Hoy tengo un poco le cafard , l’angoisse del prota de Gros Câlin con su boa enroscada en todo su cuerpo, y me falta un poco el aire. Musicalmente, recupero “Cualquier otra parte”, de Dorian, que volveré a escuchar religiosamente cada mañana para recordarme que no me gusta estar donde estoy; no me avergüenza decir que suena en mi ordenador Chenoa, que dice que “Todo irá bien”. Qué cachonda la tía… En fin, me autocensuro para no decir que hoy me vuelvo a desadaptar a este país, a ese quiero y no puedo, o quiero y no sé, o quiero y no quiero, o puedo y no puedo y no sé si tú quieres o no quieres o no puedes, pero j’en ai marre , my friend.